sábado, 24 de octubre de 2015

Sufriendo también se aprende | Crónica Half Empuriabrava


"No importa lo fuertes que golpeas, sino lo fuerte que pueden golpearte y lo aguantas mientras avanzas"
Rocky Balboa.

Empiezo esta crónica así porque refleja al 100% lo que me pasó en los últimos kilómetros de la media maratón del Half Empuriabrava. Sobre el kilómetro 13 me golpeó mi propio cuerpo, y aun así aguanté los golpes mientras avanzaba hacía la meta.

Sábado 10 de octubre, el despertador empezó a sonar a eso de las 5:30 para finalmente levantarme a las 6 para ir a trabajar. Tocaría estar trabajando durante 8 horas, pero deseando que llegara las tres de  la tarde para coger manta y carretera e ir destino a Empuriabrava en Girona para empezar otro fin de semana de medio Iron Man. Como muy tarde podía estar allí a las 9 de la tarde ya que es cuando me cerraban el box para meter la bicicleta, así que tocó realizar un viaje en coche de más de 500 km sólo y un poco justo de tiempo. Por suerte se me dio muy bien lo realicé en 5 horas clavadas y finalmente, llegué con tiempo de sobra para meter la bicicleta en box. Después de eso sólo quedaría tiempo para ir a casa, preparar las cosas para el día siguiente, ya que el triatlón era a las 9 de la mañana, y después preparar la cena (una buena pizza jaja) después sentarse un poco en el sofá para  irse a la cama a eso de las 12 de la noche.

Domingo 11 de octubre, día D. Otro día más que el despertador suena muy pronto, pero es un día de esos en los que no te cuesta nada levantarte, a las 7 ya estaba en pie. Fui el primero de toda la casa en levantarme, así que mientras me preparaba el desayuno la gente se iba levantando, los dos últimos que no se habían levantado, mi hermano y su novia, cuando terminé de desayunar, los fui a despertar con un gallo (virtual, pero un gallo) Mientras la gente terminaba de desayunar yo aproveché para ir a sacar a la perra, me acerqué a la playa y pude observar que el agua estaba totalmente tranquila, pero por desgracia la temperatura no acompañaba el agua estaba a 19º y yo sin neopreno. Finalmente no pasé frío nadando, como   me ocurrió en el SERTRI de Madrid el mes anterior.

Una vez que todos terminamos de prepararnos nos pusimos camino hacia la playa desde donde comenzaba el Half. Entramos en el box para dejar el material, casco, geles, bidones, zapatillas de correr y zapatillas de bicicleta y finalmente dejar las ruedas a la presión adecuada. Una vez concluido esto nos dirigimos hacia la playa para empezar el camino hacia el sueño de terminar otro medio Iron Man mi hermano y yo y para Juanma, nuestro amigo, para terminar su primer medio Iron Man.



9 de la mañana suena la bocina de salida, todos nos dirigimos corriendo hacia el agua, comienzo a nadar con un buen ritmo. No fue una natación muy sencilla ya que hubo mucho pelea, pero aún así me salió una natación muy buena, haciendo un tiempo de 38 minutos. Saliendo a unos 3 minutos de mi hermano y a 7 de Juanma.


Llego al box me calzo las zapatillas, me pongo el casco, gafas y dorsal y salgo del box listo para hacer 90 kilómetros de pedaleo constante. Hice una primera vuelta con muy buenas sensaciones, la segunda se me dio algo peor porque me quedé muy sólo, a penas adelantaba a gente y tampoco adelantaban, así que mi ritmo bajó un poco, pero aún así me salió un buen sector haciendo los 90 km en menos de 3 horas y con una media de 31 km/h.

Otra vez en el box, me quito las gafas, el casco, y me cambio las zapatillas. Salgo del box y con esta frase en mi cabeza: "Con paciencia y saliva el elefante se la metió a la hormiga". Lo siento por la frase jaja, pero tiene su lógica, ya que hacía como dos meses que no corría más de 15 km ni más de 1 hora, así que sabía que tendría que correr controlándome mucho y así hice. Hasta el kilómetro 13 aproximadamente iba muy contento porque me veía capaz de hacer los 21 kilómetros en menos de 2 horas, pero mi cuerpo dijo basta y tuve que luchar contra mi propio cuerpo, corriendo a ritmos de 6:30 7 min/km pero aún así luché y seguí para conseguir el objetivo de llegar a meta.

Finalmente entré a meta con un tiempo de 5 horas 37 minutos, por debajo de mi objetivo que era 5 horas 45 minutos, pero sabía que si este verano no hubiese forzado y hubiese descansado en su momento, no me hubiese lesionado y hubiese hecho una media maratón muy buena, o por lo menos mejor, lo que me hubiese permitido seguramente hacer 5 horas 30, como hizo mi hermano. Pero lo importante es que disfruté otra vez más y otra vez más con mi hermano, pero además también con Juanma. Pero también  con Álvaro, Miry, Esme, Cristina y los padres de Juanma que estuvieron allí dándolo todo animándonos.



Os dejo el vídeo que he hecho del Half espero que os guste y con este triatlón se ha acabado mi temporada. Así que ahora ya sólo salgo a entrenar para disfrutar tanto corriendo, como pedaleando como nadando.

2 comentarios:

  1. Te has marcado un temporadón Enrique! Espero que la temporada que viene vengas de nuevo al Half de Sevilla y nos conocemos fuera de la pantalla del ordenador.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias!! Ahora a ver si me recupero que voy de lesion en lesion y tambien a ver el año que viene que pruebas hago. Si voy para Sevilla no te preocupes que te aviso

      Eliminar