martes, 22 de marzo de 2016

Después de la tormenta viene la calma


El viernes me vine al pueblo para salir el sábado por la mañana con la mtb, pero me desperté y estaba cayendo el diluvio universal. Así que me fui a Valencia, ya que era imposible ponerse a dar pedaladas con la que estaba cayendo.



Ayer lunes volví de Valencia y me encontré otra vez en el pueblo y lloviendo. Miré la previsión y al día siguiente no había previsión de lluvia.

Hoy me despierto a las 8, lo primero que hago es mirar por la ventana y veo que no está lloviendo. Así que desayuno me arreglo y me cojo la bici.




Me meto en el camino, está todo compacto y con algunos charcos. Llego a San Pedro de Palmiches, hasta aquí todos los caminos estaban practicables, pero me dispongo a subir el cerro de San Pedro y en seguida me encuentro con que el camino está embarradísimo y muy escurridizo. Hasta que de repente de tanto barro me tengo que parar porque las ruedas se quedan bloqueadas. Así que quito el barro, pero me toca empujar y en tramos llevar al hombro la bici, alternado con tramos en los que puedo pedalear, hasta que consigo alcanzar la cima y bajo por el otro lado que sí está practicable.

Había tanto barro que la bici se mantenía en pie ella sola


Si me había quedado con ganas de más barro, volviendo a casa decido coger otro camino, un camino que termina siendo un barrizal y sin vuelta a atrás así que termino otra vez llevando la bicicleta al hombro durante 1-2 km y cruzando un campo de cultivo donde  cada zancada se hace durísima y además cargado con una bici que pesaría mas de 20 kg por culpa del barro.

Sembrado que me crucé con la bici al hombro


A pesar de tanto barro y tener que cargar varios kilómetros con la bici me lo he pasado a lo grande, y aunque no he podido hacer las horas planeadas, seguro que este entreno me ayudará mucho para llegar bien a la Madrid xtrema.


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